Un solo pero al análisis, Díaz Ayuso no ha marcado el paso, avisada por su trilero de la decisión que se iba a tomar ha pretendido adelantarse y los medios han caído en la trampa de decir que le marca el paso al líder
Ambas cosas pueden ser complementarias. Y creo que lo son en este caso. Ante los movimientos para convocar el Congreso Nacional y antes de que fuese público y efectivo, Ayuso se movió para dar el empujón final. Al menos, ese es mi punto de vista.
Me parece que este congreso es trascendental. España cuenta, como Alemania, con un partido de derechas conservador (todos han ido siendo desgastados, cuando no demolidos, en UK, Italia, Francia...)
Hacia dónde se incline el PP puede definir el futuro del país. Si es hacia VOX, la gente puede preferir el original a la copia, por falta de autenticidad (o como dicen ellos, complejos). Y si es hacia una posición moderada, Sánchez se los comerá en el Parlamento.
Me parece que pase lo que pase solo hay un ganador en todo esto y es VOX.
Ese viene siendo el gran dilema del PP desde 2018, ¿Qué hacer con Vox y cómo relacionarse con él? La cuestión es que eso siempre se ha cerrado en falso durante todos estos años, si es que se ha llegado a cerrar. Fue, por ejemplo, una de las principales dificultades del liderazgo de Casado, en un momento, cuya amenaza electoral para el PP era mayor. Además, por añadir una cuestión relevante, la percepción de amenaza desde el PP no ha disminuido, lo cual llama la atención, teniendo en cuenta cómo se han impuesto electoralmente, la distancia entre ambos y también que Vox quedó relegado a un papel subalterno en las coaliciones tras las autonómicas de 2023. Un papel, que la ultraderecha acabó renegando estratégicamente.
Un solo pero al análisis, Díaz Ayuso no ha marcado el paso, avisada por su trilero de la decisión que se iba a tomar ha pretendido adelantarse y los medios han caído en la trampa de decir que le marca el paso al líder
Ambas cosas pueden ser complementarias. Y creo que lo son en este caso. Ante los movimientos para convocar el Congreso Nacional y antes de que fuese público y efectivo, Ayuso se movió para dar el empujón final. Al menos, ese es mi punto de vista.
Fantástico análisis
Gracias, Ignacio :)
Me parece que este congreso es trascendental. España cuenta, como Alemania, con un partido de derechas conservador (todos han ido siendo desgastados, cuando no demolidos, en UK, Italia, Francia...)
Hacia dónde se incline el PP puede definir el futuro del país. Si es hacia VOX, la gente puede preferir el original a la copia, por falta de autenticidad (o como dicen ellos, complejos). Y si es hacia una posición moderada, Sánchez se los comerá en el Parlamento.
Me parece que pase lo que pase solo hay un ganador en todo esto y es VOX.
Ese viene siendo el gran dilema del PP desde 2018, ¿Qué hacer con Vox y cómo relacionarse con él? La cuestión es que eso siempre se ha cerrado en falso durante todos estos años, si es que se ha llegado a cerrar. Fue, por ejemplo, una de las principales dificultades del liderazgo de Casado, en un momento, cuya amenaza electoral para el PP era mayor. Además, por añadir una cuestión relevante, la percepción de amenaza desde el PP no ha disminuido, lo cual llama la atención, teniendo en cuenta cómo se han impuesto electoralmente, la distancia entre ambos y también que Vox quedó relegado a un papel subalterno en las coaliciones tras las autonómicas de 2023. Un papel, que la ultraderecha acabó renegando estratégicamente.